LA PARA – Dpto. Río Primero
La alta presencia de Spiroplasma conocido como achaparramiento en lotes de maíz, fue el disparador de una jornada a campo organizada por Más Agro Centro, en la que participó la especialista María de la Paz Giménez (INTA).
La investigadora del Instituto de Patología Vegetal (IPAVE) del INTA, María de la Paz Giménez, visitó establecimientos agropecuarios de la zona norte de la provincia de Córdoba, para verificar el estado de los cultivos de maíz respondiendo al contexto actual de alta incidencia de Spiroplasma (achaparramiento), en la región central del país.
En una jornada organizada por la empresa Más Agro Centro, en el establecimiento “Don Paco” (La Para) de Edgar Monteresino y Ariel Cassina, la referente nacional en la materia tomó contacto con más de 60 productores de esa región que compartieron su problemática actual por la alta incidencia de la enfermedad provocada por la “Chicharrita”.
Consultada por nuestro medio sobre lo observado, la especialista del INTA con años de investigación sobre la temática, remarcó que se encontraron lotes con el ciento por ciento de infestación, especialmente los maíces tardíos, en variedades que se comportaron poco resistentes a la enfermedad.
“Pensábamos que podría ser por el estrés provocado por el calor, pero no, lo que tenemos es plantas infectadas con achaparramiento. En este lote vimos dos síntomas, el producido por Spiroplasma que es una bacteria y por el Rayado Fino que es un virus, ambos transmitidos por el mismo vector”.
Cabe destacar que el fuerte impacto de la enfermedad de presencia tropical, estaría relacionada a la baja incidencia del frío en invierno, lo que provocaría que su agente transmisor, el insecto “Chicharrita” (Dalbulus Maidis), permanezca todo el año en la región. “La población que vino de la campaña pasada ha pasado directamente a los maíces chiquititos de la actual campaña”, comentó la experta.
Lo que debe hacer el productor
La situación dispara alarmas en los productores, estimándose que podría incidir en una baja en la intención de maíz para la próxima campaña estival. Al respecto consideró que es importante reservar variedades con alta tolerancia, provenientes de semilleros que tengan medidas las respuestas de sus materiales para la enfermedad. También destacó que es clave tener en cuenta cómo se comporta la temporada invernal en la región centro norte de Córdoba.
“En las últimas campañas ha crecido mucho la población del insecto vector porque las heladas han sido suaves. Se quedó acá y entonces afectó en forma endémica”, explicó Gimenez, mientras recomendó: “Hay que buscar materiales con tolerancia, con buen comportamiento a esta enfermedad, hay semilleros que han trabajado en el tema y que conocen el comportamiento de sus materiales”.
Sobre cuánto podría afectar en los rindes de la actual campaña, la técnica del INTA dijo que en promedio los maíces infectados rinden un 50 por ciento menos. “Si la infección fue temprana, cuando la planta era chiquita no va a rendir nada, pero en promedio es la mitad”.