SEMÁFORO LECHERO: EL TABLERO DE CONTROL PARA UNA MEJOR GESTIÓN DEL TAMBO

PORTEÑA – Dpto. San Justo 

Desde hace 15 años Gorgerino Consulting viene posicionándose como una consultora para establecimientos de producción láctea en todo el país y Uruguay. Su expertise les permitió desarrollar el abecé para chequear el correcto funcionamiento de un tambo.

El tambo es una empresa compleja, ya que hay que ordeñar las vacas todos los días (con buen o mal tiempo), asegurar la preñez, criar las vaquillonas para reposición, suministrar alimentación para alcanzar alta producción, prevenir enfermedades, entre muchísimas cuestiones.

Por esta complejidad, los empresarios no siempre pueden llevar todos los controles necesarios sobre los aspectos que más influyen en el resultado económico. Y así surgen problemas reproductivos, sanitarios, de producción y de márgenes, que exigen mucho tiempo y recursos para ser solucionados una vez declarados. Para detectar lo antes posible y atenuar la incidencia de factores negativos como los ya descritos, existen metodologías. Una de ellas es el Semáforo Lechero, una creación de Mauro Gorgerino, médico veterinario y consultor que brinda apoyo técnico a clientes de Select-Debernardi.

  • “El Semáforo Lechero es un sistema de monitoreo continuo, personalizado y en tiempo real del estado y evolución de una empresa lechera”, define Gorgerino y agrega: “Permite tener datos de todos los parámetros que tienen influencia en el resultado del tambo como producción, reproducción, crianza de terneras, recría, transición, confort y bienestar animal, entre otros”.

Un veterinario del equipo de la consultora visita periódicamente cada tambo y evalúa estos indicadores generando un informe. En distintas planillas clasifica como cada ítem con “verde” en el caso de cumplimiento de objetivos previamente fijados; “amarillo”, de avance insuficiente y “rojo”, cuando se deben corregir deficiencias, siempre tomando como base la visita anterior. En los registros también hay un campo para “Observaciones” en el que se detallan los problemas encontrados durante la visita: por ejemplo, alimento en descomposición en las bateas.

En el Semáforo Lechero que evalúa los aspectos de la Producción se considera la performance individual de las vacas y se la compara con la de la anterior visita y con el cuartil superior e inferior de los vientres lecheros relevados. También se tienen en cuenta el contenido de grasa y de proteína y el conteo de colonias en la leche, entre otros indicadores.

En Reproducción se monitorean las tasas de concepción y de preñez (mediante ecografías) y las técnicas de inseminación artificial que utiliza el personal en la preparación y descongelado del semen. En las visitas también se revisan la salud de las patas y de la ubre. Por su parte, en la Crianza de Terneros se anotan los natimortos (es decir, los fetos que no nacen o mueren durante el parto), la extracción, conservación y suministro del calostro, la higiene de las instalaciones y los terneros que mueren, entre otros factores.

En Bienestar y Confort se efectúa la lectura de comedero, se evalúa la dieta TMR (ración totalmente mezclada), la condición corporal, las vacas rengas y el estado del corral y de las aguadas. También, el manejo de los piquetes y de las camas de los galpones. Mediante el uso de la balanza se determina el consumo total de alimentos y su relación con la producción, también diferenciándolo con los cuartiles superior e inferior.

En la planilla de Transición se controla la condición corporal preparto, las vacas caídas, la retención de placenta, la metritis, la aparición de cuerpos cetónicos y la muerte de adultos, entre otros indicadores. Así, con un equipo de veterinarios y tecnologías digitales de control, Gorgerino puede llevar una verdadera “radiografía” con datos de cada empresa lechera y establecer los puntos de mejora de una manera concreta y con un plazo fijo para la ejecución.

Hay que remarcar que el Semáforo Lechero solo se puede implementar con una capacitación en varias disciplinas del personal que día a día realiza las tareas a campo. Con todos los datos obtenidos con los semáforos, el paso final del proceso es la evaluación de resultados económicos de cada empresa y la comparación con otras gestiones.

Sobre el negocio tambero

Con un equipo de 6 veterinarios, Gorgerino Consulting brinda asesoría técnica a unos 34 tambos con más de 25.000 vacas en ordeñe. En la Argentina brinda servicios en las provincias de Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos, Buenos Aires y La Pampa, y desde hace unos 3 años realiza asesorías a establecimientos en Uruguay.
Para Mauro Gorgerino, asesor de Select-Debernardi, no hay que dejar de poner el foco en recursos e infraestructura, equipo de trabajo, objetivos claros, gestión de la información y utilización de datos.

“Tenemos que seguir dedicando esfuerzos cotidianos a preñar las vacas y evitar la muerte de terneros en la guachera, pero no podemos quedarnos solo en eso, hay que levantar la vista hacia la organización empresarial del tambo, a diferencia de lo que ocurre en algunos casos donde la producción lechera se considera como una actividad meramente artesanal”, analiza Gorgerino.

Sobre el futuro del negocio de la leche, el profesional asegura convencido: “A pesar de la crisis que está pasando Argentina, es un negocio sumamente atractivo para emprender o continuarlo en base a ciertos parámetros de producción intensiva. El empresario hoy debe ser eficiente y prolijo en los procesos, en todas las variables productivas que proponemos desde la consultora y mantener un fuerte liderazgo para con sus equipos. Entendiendo el triángulo entre el empresariado, los asesores técnicos, y un equipo de trabajo altamente capacitado y comprometido con el proyecto, la lechería más allá del contexto actual es un negocio atractivo y rentable”.

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