Córdoba
Podrían llegar algunas heladas a la zona centro y sur.
La segunda quincena de mayo llegaría con un panorama climático inestable en la provincia de Córdoba y la región central del país, caracterizado por lluvias de variada intensidad y una marcada oscilación térmica. Según las proyecciones, las temperaturas máximas se ubicarían muy por encima de los promedios normales, alcanzando incluso los 30°C durante los primeros días, mientras que las mínimas experimentarían un brusco descenso a medida que avance la semana, sin descartar la posibilidad de heladas localizadas en algunas zonas del territorio cordobés.
En cuanto a las precipitaciones, se espera un ambiente cálido e inestable, propicio para lluvias distribuidas de manera heterogénea en la provincia. Según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, un frente de tormenta podría provocar acumulados superiores a los 100 milímetros en el sudeste cordobés, mientras que en el norte, centro y oeste, los registros oscilarían entre los 50 y 75 milímetros. Además, se anticipa el ingreso de una masa de aire polar promediando la semana, generando un marcado descenso térmico y aumentando el riesgo de heladas en áreas serranas y cordilleranas.


Oscilación térmica y lluvias intensas marcarán la semana
Para los próximos días, se prevé una brusca oscilación térmica, con un inicio cálido y temperaturas cercanas a los 30°C, que posteriormente caerían a valores en torno a los 20°C, fluctuando entre los 16°C y 31°C. Este cambio estará impulsado por la llegada de un frente de tormenta que traerá vientos del sur y un enfriamiento generalizado del otoño.
Las lluvias, por su parte, se esperan de variada intensidad a lo largo del territorio provincial. Las proyecciones climáticas apuntan a un incremento de la inestabilidad, con posibles tormentas en gran parte del área agrícola, excepto en los extremos noroeste y sur. De cumplirse estos pronósticos, Córdoba se enfrentaría a una semana marcada por contrastes climáticos, abundantes precipitaciones y riesgo de heladas en zonas específicas, anticipando un final de mayo cargado de variabilidad meteorológica.