Con una inversión progresiva en paneles solares, la cooperativa fortalece su compromiso con la sustentabilidad, reduce costos operativos y aporta activamente a la lucha contra el cambio climático.
Porteña – Dpto. San Justo.
En el marco de su compromiso con la sostenibilidad y el desarrollo de un modelo de negocio con triple impacto -económico, social y ambiental-, la Cooperativa Ganadera, Agrícola y de Consumo Porteña Ltda. lleva adelante una fuerte inversión en generación de energía fotovoltaica, consolidándose como referente en la transición hacia energías limpias en la región.
Daniel Sadone, gerente de la Cooperativa, explicó que la iniciativa se enmarca dentro de una visión de largo plazo que contempla no solo la eficiencia operativa y el ahorro energético, sino también la responsabilidad ambiental. “Nuestra cooperativa viene trabajando en la sustentabilidad desde una mirada integral. Nos preguntamos constantemente qué podemos hacer diferente y cómo podemos colaborar con el cuidado del planeta”. La decisión de invertir en paneles solares responde a la necesidad de mitigar la huella de carbono, reduciendo la dependencia de fuentes energéticas tradicionales como el gas, el petróleo o la energía nuclear. “El sol es una fuente inagotable y limpia. Utilizarlo para generar electricidad no solo es amigable con el ambiente, sino también económicamente conveniente”.
Un plan escalonado y estratégico
La energía solar fotovoltaica se ha convertido en una de las fuentes renovables de mayor crecimiento a nivel mundial. En la provincia de Córdoba, se desarrollan iniciativas proyectos de generación distribuida comunitaria, proyectos híbridos, e incentivos a la generación distribuida. En este contexto, la Cooperativa de Porteña se posiciona a la vanguardia con un plan de inversión en paneles solares que abarca varias de sus unidades operativas:
- Supermercado: se realizó una inversión para generar 71 kilovatios, lo que permitió recuperar más de 17 millones de pesos en 12 meses, gracias al ahorro directo en la factura eléctrica.
- Planta de procesamiento de soja: en dos etapas, se avanzó con una instalación de 60 kilovatios en cada una, utilizando tanto los techos como estructuras tipo pérgola que además brindan sombra para los animales en verano para la Feria.
- Etapa en desarrollo: ya se adquirieron más de 100 kilovatios adicionales para ser instalados en los techos del sector de administración de cereales, oficinas administrativas centrales y la ferretería.
Todas las instalaciones están registradas bajo la figura de usuario generador-consumidor, lo que permite a la cooperativa inyectar el excedente de energía a la red eléctrica, obteniendo a cambio una retribución del 40% del valor de la tarifa, mientras que el consumo directo representa un ahorro total al evitar el pago por kilovatio. Cabe destacar que la inversión aproximada es de 1.000 dólares por kilovatio con un estimado de recuperación de inversión de tres años y medio.
“Es una inversión que se recupera entre tres años y medio y cuatro” destacó Sadone, y agregó: “En un contexto donde los costos operativos son una preocupación constante, esta tecnología nos permite ser más eficientes y, a la vez, ser coherentes con nuestros valores cooperativos”. Más allá del impacto económico, la apuesta por energías renovables reafirma el compromiso de la Cooperativa de Porteña con el medio ambiente y el futuro.
Con estas acciones, la Cooperativa no solo moderniza su estructura operativa, sino que también se posiciona como un actor clave en la transformación energética de la región, demostrando que es posible crecer de forma responsable y sostenible.